El Instituto Anglo Moderno consigue la Acreditación del Modelo SIDIE
El Anglo Moderno, una escuela que cuida, educa y transforma
El Instituto Anglo Moderno ha sido acreditado con el modelo SIDIE (Sistema Institucional de Disciplina Inteligente en la Escuela), un reconocimiento que valida su compromiso con la educación socioemocional, la convivencia escolar y la corresponsabilidad educativa, fortaleciendo así una cultura de valores, diálogo y bienestar.
El modelo SIDIE propone una visión de la disciplina como proceso formativo, no punitivo, colocando la inteligencia emocional en el centro de la vida escolar. Esta acreditación representa mucho más que una distinción: es el reflejo de una cultura escolar que educa desde el cuidado.
¿Qué es el modelo SIDIE y por qué es importante en la escuela?
Diseñado por Vidal Schmill, el modelo SIDIE certifica a escuelas que promueven una convivencia sana y afectiva, donde la gestión emocional y los vínculos humanos son tan prioritarios como el aprendizaje académico.
¿Qué implica ser una escuela acreditada por el modelo SIDIE?
Significa haber demostrado, mediante evidencias verificables:
- La aplicación continua de estrategias de disciplina inteligente.
- La capacitación permanente del personal docente en herramientas de educación socioemocional.
- La construcción de una cultura escolar basada en la empatía, el respeto y la prevención.
- La capacidad institucional para acompañar a cada estudiante en su desarrollo personal y social.
Un logro de toda la comunidad educativa
La acreditación SIDIE es un proceso progresivo. El Instituto Anglo Moderno ha recorrido un camino sistemático de implementación que incluyó sensibilización docente, elaboración de protocolos, aplicación de diagnósticos y diseño de estrategias restaurativas, diferenciadas por nivel educativo.
Este logro ha sido posible gracias al compromiso activo de docentes, estudiantes, familias y directivos.
En el Instituto Anglo Moderno nos sentimos profundamente orgullosos de este paso. Pero, más allá del reconocimiento, asumimos con convicción la responsabilidad de seguir avanzando: fortalecer nuestras prácticas, compartir aprendizajes con otras comunidades educativas y consolidarnos como una escuela donde cada estudiante se sienta escuchado, acompañado y valorado.
Ser una escuela acreditada no es solo una meta alcanzada: es una responsabilidad viva.